Contrariamente a lo que uno podría pensar, el español no es un idioma fácil de aprender. Incluso para un italiano puede resultar difícil, aunque el italiano y el español se parecen mucho. Además se debe tener en cuenta que el español que se suele estudiar es el castellano. En realidad hay muchas más variantes en el mundo que tienen entre ellas importantes diferencias sobre todo lexicales, pero también morfosintácticas en ciertos casos.
Tomamos como ejemplo esta historieta de Fernando Rocchia que tengo ya traducida en italiano y publicada en mi cuenta de Instagram (@zanessis_traduzioni). En el español estándar “viejo” tiene un sólo significado. Sin embargo, viajando por los diferentes países latinoamericanos se descubren significados distintos de la misma palabra. Así que en Argentina y en Perú se utiliza para referirse cariñosamente al papá, mientras que en México significa “amigo” (sería el equivalente del inglés “bro”).
Desde el punto de vista morfosintáctico también podemos notar una diferencia importante. Rocchia, autor argentino, escribe “tenés puestos”. “Tenés” es la segunda persona singular del presente de indicativo del verbo “tener”, pero sólo en Latinoamérica puesto que en el español castellano es “tienes”. Por lo tanto la desinencia -és se utiliza para la segunda persona singular del presente de indicativo de todos los verbos, pero sólo en el español de las variantes latinoamericanas. De manera similar, el “tú” español castellano es substituido por el “vos” en toda Latinoamérica…¡no lo confundáis con el nuestro “vosotros”!
Entonces entendéis que las variantes del español del continente americano requerirían en sí mismas un estudio muy detallado…